Los British Shorthair descienden del cruce entre los gatos que llevaron a Britania los romanos y los nativos de la isla, de esto hace más de 2000 años.
En 1871 Harrison Weir creó el British Shorthair haciendo una selección de los gatos callejeros más bonitos de la época.
Las dos guerras Mundiales provocaron la casi extinción total del gato británico. Para que la raza volviera a surgir tuvieron que recurrir a otras razas como el persa y cruzarlos.
Debido a tanto cruce que ha sido sometido durante su historia, pueden haber muchos colores y se han reconocido 30 colores.
Es un animal muy sociable con otros gatos y perros. Se lleva muy bien con los niños.
fuente wikipedia
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